Deseos en una botella
Una vez pasadas las elecciones, la campaña y la resaca postelectoral (que nos dura), hoy todavía nos movemos en territorio de análisis político e interpretación de los resultados. Unos resultados magníficos para Zapatero y particularmente espectaculares para los socialistas en Cataluña. Me siento orgulloso porque todo el esfuerzo ha merecido la pena y por cada acto, por cada cartel colgado, por cada argumento dado durante la campaña, por todo el material repartido... por todo.
No seré yo el que se ponga a hacer análisis de los resultados. Los medios ya van llenos de ellos y muchos contienen datos interesantes, curiosidades y claves para entender lo sucedido durante la jornada electoral. La verdad es que hoy me apetece más ponerme a pensar en algunas cosas que quiero hacer. Después de todo, sin proximidad de elecciones a la vista, el panorama se ve mucho más claro y, previsiblemente, un servidor va a ganar algo de tiempo para sí mismo. Así que, con el nuevo tiempo del que voy a disponer a partir de ahora, pienso hacer algunas cosas:
- Voy a ver más cine. Yo era de los que siempre sacaba ratos para ir al cine y con las últimas campañas había perdido bastante esta costumbre. Me apetece acudir a algún estreno de vez en cuándo o, simplemente, ver con calma alguno de esos DVD que me están acumulando polvo en casa.
- Escapadas de fin de semana (o escapadas de un día, da igual). Viene el buen tiempo y los fines de semana son propicios para perderse por cualquier paraje a menos de 3 horas de coche. Tengo algunos paseos pendientes: Aiguestortes, Girona, Castellar de N'Hug o cualquier pueblo del Maresme. La excusa casi siempre es gastronómica. La compañía siempre es maravillosa.
- Perderse en un buen libro. Tengo unas cuántas lecturas pendientes sobre mi escritorio y ya va siendo hora de poner remedio a ello. Murakami, Joyce, Asimov... me están esperando. Y también me apetece pasarme horas ojeando libros en alguna librería (no solo ojeo, al final también acabo comprando).
- Tomarme unas cervezas con los amigos. Qué ganas tengo de dejarme llevar por el ánimo y la conversación durante unas cañas con algunos buenos amigos, en cualquiera de esos bares geniales de pincho y caña que hay desperdigados por los barrios de Mataró. ¡Qué sería del hombre sin los amigos!
- Política y jóvenes. Tenemos retos y trabajo por delante en esta materia. Y sin el calendario constantemente marcado por la agenda electoral, ésta es una labor mucho más agradecida. Sin ánimos de refugiarme todavía en eslóganes de campaña, creo que en los próximos meses se nos avecina una época optimista. Tengo muchas ganas de afrontarla.
Y como el que pone sus deseos dentro de una botella lanzada al mar y llevada por corrientes marinas hasta orillas perdidas, yo reconozco que hoy me siento absorbido por una tranquilidad enorme y unas ganas tremendas de salir a la calle a pasear un rato.
Perdonen por el extraño estilo de este post, pero al fin y al cabo, después de haber completado todo el ciclo electoral (llevamos 8 campañas en 4 años), el que cariñosamente les escribe desde estas líneas se siente como un pajarillo que remonta el vuelo con los primeros rayos de sol de la primavera. Supongo que los que alguna vez se hayan implicado a fondo en una campaña me entenderán, los que jamás se hayan expuesto a ello, supongo que quizás no. En cualquier caso cuidénse y si pueden, ahora que llega la semana santa, márchense unos días de vacaciones.
2 Comments:
Por suerte, Zapatero es de nuevo elegido como Presidente. España ha vuelto a hablar, y eso es un alivio. Realmente llegué a sentir miedo, miedo porque no sé que harían estos en el gobierno... todo volvería a ser un "calvario" en el cual los derechos que Zapatero ha conseguido serían restringidos de nuevo. Por suerte, España es Socialista, y la niña de Rajoy parece ser que también.
Un besito, y si quieres celebrar, Zapatero nos prometió que vendría al pueblo de sus abuelos (a Extremadura) a celebrar su victoria. Si cumple, que confío en que lo haga, lo celebraremos con él. De todas formas, te mantengo informado por si te animas a venirte!! jeje
Besazos.
Pdta: por cierto, tengo un amigo en Mataró! jajaja
María,
pues sí, al final la niña de Rajoy era socialista.
Tengo pendiente una visita a Extremadura. Hace algunos años me pasé unos días de agosto en un pueblecito de Cáceres, pero me falta recorrerme la provincia de Badajoz, que además es la tierra de mis abuelos. A ver si me lo planteo seriamente y me dejo caer por allí.
Nos vemos, un abrazo.
Publicar un comentario
<< Home