Gotas de lluvia sobre mi cabeza

Hoy me resuena en la cabeza aquella vieja canción que sonaba en una clásica escena de aquella también vieja película, "Dos hombres y un destino". La película, un western intemporal y desacomplejado, se merecería un comentario aparte por su singularidad, pero éste no sería el objeto de este post. Pero el caso de la canción es diferente. No por ella en sí misma, sino por la melancolia que de ella se transciende y que con ella se evoca.

Será el otoño, o será que se ha muerto Paul Newman (un tipo que siempre jugaba limpio, según he leído hoy en alguna parte), pero hoy me asalta cierta melancolía. O será que cumplir años me hace pensar en cosas que me gustaría repetir y que hoy son irrepetibles. O será que este año el otoño es otoño y no un sucedáneo barato del verano, aunque algunos estemos de vacaciones. O será quizás que sencillamente hoy es domingo y a los domingos normalmente les gusta tener ese punto de día extraño, casi perdido al final de la semana. O será que, cómo dice la canción, caen gotas de lluvia sobre mi cabeza.

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